Auch, la ciudad junto al río Gers. El palacio de justicia. La catedral, la torre del tribunal y una escalera monumental

La ciudad de Auch tiene una historia única que enseñarnos. Es la capital del departamento de Gers que toma su nombre del río que la cruza. En ella nos esperan siglos de cultura y una gran cantidad de monumentos para visitar entre los que se encuentra la Catedral de Sainte-Marie con la distinción de patrimonio de la humanidad.

El departamento de Gers, parte de la antigua región de Gascuña de la que Auch era también su histórica capital, ha sido definido como el otro sur de Francia, donde nos alejamos del típico sur francés y las grandes urbes francesas para encontrar lugares más rurales y tranquilos con mucho encanto.

El nombre de la ciudad de Auch proviene del pueblo que se asentó en esta región, los Auscii, una tribu celtibérica. Durante el imperio romano Auch se convirtió en un gran ciudad galo-romana, Augusta Ausciorum, que formaba parte de Novempopulania o el País de los Nueve Pueblos. Auch fue una de las pocas ciudades en Galia a las que los emperadores otorgaron el poder de gobernarse a sí mismas. En el año 211, Caracalla les otorgó el derecho de ciudadanía junto a sus privilegios como poseer foro, termas, teatro o senado. Tras la caída del Imperio Romano, durante el siglo V, las sucesivas invasiones de los vándalos, suevos, alanos y godos saquearon la ciudad. En 732 los moros la arrasaron y en el 844 los normandos la asolaron. La ciudad se convierte en sede episcopal y en el 879 en arzobispado. Entre los invasores, los vascons dieron su nombre a la provincia romana: Vasconia, la futura región denominada Gascuña, en la cual Auch, como ciudad medieval, se convirtió en su capital y en una importante parada obligatoria para los peregrinos en su camino a Santiago de Compostela. Auch se encuentra en una encrucijada de caminos entre Toulouse (80 km), Agen (70 km) y Tarbes (70 km).

Pero, la historia y cultura de Auch las encontraremos durante nuestra ruta por la ciudad. Iremos directos al Palacio de Justicia de Auch. Desde el emplazamiento del tribunal comenzamos a conocer esta imprescindible ciudad francesa.

Plano de la ciudad de Auch (descarga en pdf)

El Palacio de Justicia de Auch

Se encuentra al final de un gran paseo o avenida arbolada llamada Allées d’Étigny. El Palacio de Justicia de Auch fue construido en 1863 y posee un cierto aire clásico. A ambos lados de las escaleras de acceso hay dos estatuas de la diosa Themis, deidad de la justicia en la mitología griega que significa «ley de la naturaleza». Estas estatuas están colocadas sobre un pedestal para mostrar la importancia de la ley y la justicia justo antes de entrar en su palacio. En la estatua de la derecha, se muestra a la diosa sosteniendo una espada, con la que castiga a quienes no obedecen la ley. La de la izquierda se representa con las leyes y sus códigos donde apoya su brazo.

Sobre la puerta central, dos columnas sostienen la inscripción Palais de Justice y las tablas de la ley. El palacio de justicia se inauguró el mismo año que la escalera monumental que también veremos en nuestra ruta. El palacio de justicia fue construido en el lugar donde anteriormente existía una antigua taberna y junto al palacio, detrás, se construyó la cárcel que daba servicio al mismo.

En 2014 el palacio de justicia fue sometido a una importante restauración para hacerlo más accesible, adecuarlo a las nuevas tecnologías, ampliar su capacidad o, por ejemplo, evitar flujos de víctimas con detenidos. Posee una magnífica sala histórica del tribunal donde se celebran los juicios del jurado (cour d’assises), los actos judiciales importantes y, también, ha sido usada como escenario de teatro en el espectáculo Témoignage, basado en la obra del poeta estadounidense Charles Reznikoff (1894-1976) quien, mientras trabajó en una editorial jurídica, compuso cientos de poemas basándose en las declaraciones de testigos ante los tribunales de justicia norteamericanos desde finales del siglo XIX hasta comienzos del XX.

«El testimonio corresponde a lo dicho por un testigo ante el tribunal: no se trata de una declaración de lo que sintieron, sino de aquello que vieron o escucharon. Lo que quería hacer era crear mediante la selección, ordenamiento y el ritmo de las palabras empleadas al modo de un estado o sensación. Bien podría haber escogido cualquier otro período porque las mismas cosas que ocurren hoy ocurrían también en 1885»

Charles Reznikoff

La sala histórica de audiencia de Auch está organizada en varios espacios diferenciados. Primero, destaca el espacio destinado al público donde se encuentran bancos de madera distribuidos en filas que permiten el paso por un pasillo central.  En el lado izquierdo de la sala, hay doce asientos de madera y cuero, ligeramente más altos. Estos asientos fueron creados para acomodar al jurado compuesto de ciudadanos fuera del mundo de la justicia. En el centro de la sala y en el lado derecho, puestos y bancos están reservados para abogados y acusados. Finalmente, la última parte de la sala se eleva para mostrar el poder de los jueces, representantes supremos de la justicia. En el centro de la plataforma, un gran escritorio de madera maciza, y, detrás, tres sillones uno más alto que los otros dos. La gran puerta de madera que se puede ver detrás de los sillones y el escritorio, es a través de la cual los jueces entran a la sala después de que el secretario los anuncie. Este último tiene un puesto reservado para él, ubicado a la izquierda de los jueces. El fiscal se encuentra a la derecha en su propio asiento.

Video sobre juicio celebrado en la sala de audiencias del Tribunal de Auch

Por esta sala han pasado miles de asuntos desde 1863. Nosotros hemos recuperado un interesante caso que fue juzgado en este tribunal en 1904. Es el caso de la envenenadora de Saint Clar. Fue un asunto que despertó interés en la prensa de la época y puso a prueba, de nuevo, a la ciencia ante los tribunales. Se juzgó a una mujer de 25 años, Rachel Dupont, la señora Galtié, por un delito de tentativa de incendio, robo y asesinato por envenenamiento de tres personas: su marido, su abuela y su hermano. En el enlace podéis acceder al Juicio del caso de la envenenadora de Saint Clar.

En la actualidad, el tribunal de Auch desempeña el papel de tribunal judiciarie resolviendo en primera instancia asuntos civiles o penales incluidos asuntos del jurado. En caso de segunda instancia depende del tribunal de apelación de Agen que conoce de los asuntos de Gers, Lot y Garona. Más información sobre el sistema de justicia en Francia en este enlace.

El palacio de justicia de Auch se encuentra a unos pocos metros del centro histórico de la ciudad, de hecho, está rodeado de varios monumentos históricos y culturales como el seminario fundado en 1667 que es actualmente la Maison Diocésaine de la diócesis de Auch. Tan solo tenemos que seguir la Allées d’Étigny, es decir, la avenida arbolada junto al tribunal de unos 250 m de largo que se extiende sobre un antiguo cementerio. Al final, ya podremos ver la catedral y el ayuntamiento de Auch pero antes encontramos una estatua en honor al intendente Antoine Mégret d’Étigny, administrador de la Generalidad de Gascuña, considerado el personaje histórico que dinamizó y modernizó la ciudad de Auch. La estatua fue inaugurada en 1817 y está flanqueada por 2 leones de piedra que sostienen fasces, uno de ellos, y balanzas, el otro, emblemas del poder y la justicia.

Justo en su escalera, nos llaman la atención ramos de flores en el suelo con la bandera francesa, justo arriba vemos varias placas. Es un memorial por los que lucharon en la resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial y por los republicanos españoles exiliados a Francia después de la Retirada de 1939 que se alistaron a la resistencia y participaron en la liberación de Gers y de Francia. Igualmente, dos placas nos recuerdan a los deportados a campos de concentración y los crímenes contra la humanidad cometidos durante la ocupación nazi por el gobierno colaboracionista de Vichy que no serán olvidados.

La ciudad de Auch, al igual que con los republicanos españoles, también, fue refugio para afrancesados españoles ilustres como José Narganes, Pedro Gorostiza, los eclesiásticos Estala, Esterripa y Paniagua, el célebre arabista Francisco Zegers o el escritor Antonio Zamacola. En agosto de 1813 Auch llegó a albergar a 422 refugiados españoles de ideas liberales.

Ayuntamiento de Auch

En este mismo lugar, a uno pasos, encontramos el ayuntamiento de la ciudad. Edificio que fue construido hacia 1770 por iniciativa del intendente d’Étigny. Alberga en su interior un bonito y peculiar teatro a la italiana que se sigue utilizando, así como un salón de personajes ilustres, antiguo salón de música que alberga retratos de gascones famosos, ocho de los cuales fueron realizados por el pintor romántico Gustave de Lassalle-Borde. En el enlace podéis descargar en pdf la guía de hijos ilustres que figuran en las salas del ayuntamiento de Auch. El ayuntamiento de Auch es monumento histórico desde 1947.

La Catedral de Sainte Marie d’Auch

La extraordinaria Catedral atraerá nuestras miradas desde cualquier rincón de la ciudad. Se alza en una gran plaza. La Catedral de Auch impone. Es la auténtica joya de la ciudad. Su construcción se remonta al año 1489 sobre una antigua catedral románica. Fue terminada su construcción dos siglos después de su inicio, hacia 1680. Su portada estaba basada en diseño realizado en 1560 con la típica división gótica aunque el triple pórtico con columnas de estilo corintio nos lleva de vuelta a la cultura clásica del Renacimiento. Está considera como una de las últimas catedrales góticas de Francia y un claro ejemplo de transición arquitectónica entre el gótico flamígero y el estilo renacentista.

La historia del obispado de Auch comienza hacia el IV. Durante el siglo IX, el obispado, debido a la importancia que adquiere la diócesis de Auch, se convierte en arzobispado. Hacia el 1120 se consagra la catedral en estilo románico y se levantará el palacio arzobispal en uno de los laterales y a su espalda el barrio de canónigos. La antigua catedral no pudo aguantar el paso de los años debido a algún incendio y ataques durante la Guerra de los Cien años. Sobre ella se construyó la actual.

Mientras, en el siglo X, el ducado de Gascuña, se verá fraccionado por repartos hereditarios en distintos condados feudales donde la casa de Armañac será la que domine estos territorios. Es alrededor de esta época cuando la autoridad de los arzobispos de Auch comienza a ser tan extraordinaria que se puede decir, sin exagerar, que eran para los señores de Gascuña lo que los papas eran para los monarcas de Europa. El escudo de armas de la ciudad todavía revela hoy la lucha entre el león rojo, escudo de armas de Armañac, y el cordero, símbolo de los arzobispos. De hecho, desde la Edad Media, los cónsules que representaban a la ciudad debían jurar respeto a los privilegios y costumbres y a los condes de Armañac y a los arzobispos, señores de la villa en paréage o pariaje: un contrato feudal de asociación entre dos o más señores, garantizando igualdad de derechos y la propiedad conjunta de la misma tierra. La palabra paréage se deriva del latín pariagium. Desde un punto de vista político, el paréage puede asociar dos señores, muy a menudo un laico y un eclesiástico, para gobernar un señorío o una provincia.

De todas formas, esas relaciones en Auch hicieron «disfrutar» a sus ciudadanos de un fuero particular: los derechos adquiridos y reconocidos a sus habitantes fueron solemnemente confirmados y sancionados en el año 1301 por Bernard VI, conde de Armagnac, por el arzobispo Amanieu II, el capítulo y el síndico de la ciudad, creándose un código de normas escritas, al que debían someterse los habitantes, con el título de las Coutumes d´Auch. Estas normas permanecieron vigentes hasta la Revolución de 1789 y contenían los derechos políticos y normas civiles-penales. En toda Francia a través de la redacción por escrito de las costumbres, el derecho consuetudinario se volvió intangible. Facilitó el trabajo judicial y el trabajo doctrinal de los juristas pero la dispersión normativa era enorme.

«Hay ciento cuarenta y cuatro costumbres en Francia que tienen fuerza de ley, … casi todas diferentes, de modo que un hombre que viaja en este país cambia la ley casi tantas veces como cambia de poste de caballos»

Voltaire (1694-1778)

Si la catedral en el exterior resulta imponente, en el interior nos quedaremos fascinados ante las 18 vidrieras de Arnaut de Moles realizadas en el siglo XVI, así como, con la sillería del coro y el órgano mayor de Jean de Joyeuse ambos del siglo XVII que son las obras maestras del edificio. La catedral ha sido inscrita en el patrimonio mundial de la Unesco, como hito del camino de Santiago de Compostela, en 1998. Tanto en el ayuntamiento como en la catedral nos sorprendió la tranquilidad con que hicimos las visitas, sin apenas gente, pese a tan importante patrimonio y bonita ciudad.

La preafectura de Gers y la casa medieval

A la salida de la catedral podremos ver una bonita casa del siglo XV, la casa del comerciante. Se encuentra en la misma plaza y es un símbolo de la ciudad. Es vestigio de la arquitectura urbana medieval. Fue una casa destinada al comercio, la planta baja se dedicaba a tienda y los pisos superiores a vivienda de la familia de los comerciantes propietarios. A la técnica constructiva empleada en la casa se le llama pan de bois. Consiste en entramados de madera y fue utilizada desde la Edad Media hasta el siglo XIX, pues resultaba ser barata, resistente, ligera y duradera.

En la misma plaza, en un lateral, se encuentra la oficina de turismo donde nos informarán sobre la ciudad y nos invitarán a subir a la última planta del edificio para contemplar desde unas cristaleras la gigante catedral.

La preafectura de Gers junto a la catedral, es el que fuera palacio arzobispal de Auch. Este antiguo palacio arzobispal de origen medieval fue remodelado hacia 1750 adquiriendo su actual estilo. El edificio convertido tras la Revolución francesa en bien nacional, alberga, desde 1800, la prefectura, el órgano de gobierno estatal del departamento de Gers que reúne servicios como la gendarmeria. Solo se puede visitar durante las Jornadas europeas del patrimonio y os enlazamos un video donde se presentan las llamativas instalaciones del antiguo palacio.

Hacia la ribera del rio Gers. La Escalera Monumental de Auch y D’Artagnan

Desde este punto podremos adentrarnos por las calles de Auch hacia la plaza Betclar donde se ubica el mercado y llegar a la calle Dessoles que era la antigua calle mayor de la ciudad en la época medieval. En ella localizamos varias casas señoriales del siglo XVII y comercios como librerías o pâtisseries donde tomar un café y algún dulce. Al final de la misma encontraremos la iglesia neoromana de Saint Orens, dedicada al santo obispo de Auch en el siglo V originario de Huesca y, de vuelta, podremos pasar por la torre romana, el edificio más antiguo de la ciudad, construido en la época del Bajo Imperio romano. Muy cerca, tendremos el Musee des Ameriques, instalado en un antiguo convento jacobino (dominicos). El museo alberga una de las más importantes colecciones de objetos precolombinos de Francia.

Desde el museo bajamos hacia el río Gers para ver la bonita vista típica de la ciudad de Auch destacando su catedral en lo alto de la colina y donde se instaló la ciudad en sus orígenes.

Nos falta encontrar la famosa Escalera Monumental de Auch con sus 374 peldaños. Para ello tan solo tenemos que seguir la ribera del río hacia la ciudad. La escalera fue inaugurada el mismo año que el palacio de justicia, en 1863, y supuso un cambio en la forma de ciudad uniendo la zona baja con la alta. Hasta ese momento solo estrechas escaleras, llamadas pousterles, se usaban y se usan para bajar desde las que eran las murallas de la ciudad hasta el río y si, efectivamente, las probamos, son bastante estrechas y empinadas, por ello, durante la Edad Media, los habitantes las utilizaban para ir a buscar agua y debido a su forma servían de defensa en caso de que fuesen atacados.

En la gran escalera monumental, encontramos diversos tramos con esculturas como el Observatorio del tiempo de Jaume Plensa que nos recuerda el pasaje bíblico del Diluvio Universal pues en Auch han sufrido grandes inundaciones periódicas, la última en 1977.

En el rellano intermedio podemos admirar la estatua de bronce que Firmin Michelet realizó en 1931 del famoso gascón: Charles de Batz (1615-1673), más conocido como conde d’Artagnan, capitán de los Mosqueteros del rey, nacido en el castillo de Castelmore, en Lupiac, un pueblo situado muy cerca de Auch. Es célebre por haber inspirado el personaje de D’Artagnan, uno de los protagonistas de la novela Los tres mosqueteros (1844) de Alejandro Dumas.

La torre de Armagnac, el tribunal eclesiástico de Auch y la cárcel

La escalera monumental termina o comienza en la Plaza Salinis. Es en esta zona, a espaldas de la catedral, donde se encontraba el barrio de los canónicos que servían en ella. El barrio en gran parte fue reformado para la construcción de la escalera monumental en el siglo XIX y hoy, en el centro de la plaza, podemos ver un monumento por los caídos durante las Guerras mundiales.

Junto a la plaza se ubica el palacio de la Officialité del siglo XIV cuya función era ser la sede del tribunal eclesiástico de la diócesis donde se juzgaba a sus clérigos. Desde el siglo XIII la iglesia, cada diócesis, comienza a poseer su propia jurisdicción a modo de privilegio. El nombre officialité tiene su origen en el oficial o vicario judicial que es un juez eclesiástico que ejerce sus funciones como poder delegado del obispo diocesano. 

En este palacio los miembros del clero debían responder por acusaciones como la falta de castidad, el abandono de las obligaciones eclesiásticas, falta de formación, reventa de alimentos, robos, etc, pero también juzgaban ciertos casos que afectaba a seglares como separaciones, nulidades, adulterios e intentarán evitar los matrimonios clandestinos y entre familiares. También, juzgaban delitos relacionados con la fe, como blasfemias o herejías. Las jurisdicciones en el Antiguo Régimen a veces eran complementarias, podían acordarse en distintos tribunales sanciones por un mismo hecho, por ejemplo, un deudor podía ser demandado ante un tribunal de la ciudad y ser excomulgado por la Iglesia. Durante la Revolución francesa y hasta el fin del siglo XIX el palacio de la Officialité, tras la conversión de las propiedades de la Iglesia en bienes nacionales, fue usado como sede judicial hasta que fue construido el nuevo palacio de justicia y su cárcel, momento en que fue devuelto su uso a la Iglesia.

La torre junto al palacio es conocida como de Armagnac pero, pese a su nombre, nunca perteneció a los condes de Armagnac. Esta torre fue construida en el siglo XV para servir de cárcel eclesiástica, es un símbolo de las atribuciones judiciales del Arzobispo. Durante el Antiguo Régimen por falta de prisioneros fue utilizado como almacén para los archivos del cabildo catedralicio, antes de volver a ser utilizada como cárcel de la ciudad a partir de la Revolución francesa. La torre posee 7 calabozos, uno para cada piso. En la actualidad es la sede del museo del Tesoro de la Catedral. Desde aquí disponéis de una visita virtual por su interior:

Desde esta plaza podemos callejear tranquilamente por la ciudad hasta llegar a su biblioteca pasando por la llamada casa de Henri IV, el Buen Rey, en la calle de Espagne 22. Allí veremos una impresionante casa con escalera de piedra donde dice la tradición que durmió el rey con la reina Margot y Catalina de Médicis en el año 1578.

Ya de regreso a la plaza de la Libération, donde está el ayuntamiento, recomendamos pasear por la calle Gambetta, y ver el edificio del Hôtel de l’Intendance construido en 1760 que hoy es la oficina de correos y en sus orígenes era la sede de la asamblea del departamento durante la Revolución y hospital militar durante la Primera Guerra Mundial. Enfrente tendremos el antiguo mercado de 1843 por el importante comercio de vino y grano que hubo en la ciudad durante el siglo XIX.

Dormir y comer en Auch:

Más información y fuentes:

Ciudad de Auch 

Grand Auch 

Musee des Ameriques

Oficina de Turismo de Auch 

La envenenadora de Saint Clar. Un juicio del jurado en la Francia de principios del siglo XX

https://www.bnf.fr

Histoire du droit en Gascogne durant le haut moyen-âge

Histoire de la ville d’Auch depuis les Romains jusqu’ en 1789

Libros recomendados: