En la justicia existen errores y más aún cuando el camino para llegar a la conclusión judicial se basa en un error científico. Al igual que la ciencia avanza, la justicia con ella. El proceso o caso Danval (affaire Danval) comparte interesantes similitudes con el famoso caso Dreyfus, ambos ocurridos en Francia a finales del siglo XIX y principios del XX.
París (Francia), 8 de mayo de 1878, comienza el juicio contra Louis Danval. Está acusado del asesinato de su mujer. Danval insiste en su inocencia, jamás envenenó a su esposa con arsénico …….
Nueva Caledonia (Océano Pacífico sur), 23 años más tarde, 1901, Louis Danval recibe una extraña visita en su cabaña colonial penitenciaria, era Jacques Dhur periodista del diario Le Journal. Dhur se encontraba allí visitando la colonia penal para conocer de primera mano la vida de los presos en aquella isla. El caso Dreyfus, ocurrido a finales de 1894, por el que se condenó al capitán del Ejército francés Alfred Dreyfus, de origen judío, por alta traición al ser acusado de entregar a los alemanes documentos secretos y desterrado a prisión perpetua en la colonia penal de la Isla del Diablo en la Guayana francesa y luego descubierto que todo era una trampa contra Dreyfus, había puesto en el punto de mira de la prensa la condiciones de los desterrados franceses que en las colonias de ultramar francesas cumplían sus penas.
Pero, ¿Cómo llegó Louis Danval a Nueva caledonia?
Tras participar en la Guerra franco-prusiana de 1870, Louis Danval, diplomado en farmacia, adquirió una ruinosa farmacia en París que tuvo que cerrar a los tres años. Un par de años más tarde, vuelve con un socio al negocio de fabricación de elixires y laxantes que llevan su nombre.
Aunque los negocios no prosperan del todo, el amor le sonríe y a sus 30 años conoce a Mathilde Jarry, una joven de 20 años, con quien se casa el 30 de enero de 1876. Tras recibir la dote que ella aporta al matrimonio, unos 10.000 francos, Danval decide, de nuevo, abrir una farmacia en París. Será el farmacéutico de la rué de Maubeuge, en el famoso barrio de Montmartre.
Sin embargo, al poco, su joven esposa enferma. Los médicos que la atienden no encuentran el remedio a su diarrea, vómitos, fiebres nocturnas y delirios. Después de un año de varios tratamientos médicos, no mejora. Mahitlde Danval muere el 9 de septiembre de 1877.
La investigación e instrucción de la muerte de Mathilde danval
La familia de Mathilde desconfía de Louis Danval. Una carta anónima alerta a la justicia de su fallecimiento. El juzgado de instrucción abre una investigación. La autopsia de Mathilde se realiza 12 días después de su muerte por los médicos especialistas Georges Bergeron y Émile Delens. No se encuentra nada relevante, salvo que en el cuerpo de la víctima hay aproximadamente 1 mg de arsénico. Los expertos afirman que esa cantidad de veneno no puede provenir de un tratamiento farmacológico ni de los alimentos, y por lo tanto, concluyen que se trata de una muerte por intoxicación intencionada de arsénico.
A la vista de este informe, Louis Danval se convierte en el principal sospecho de la muerte de su mujer. Será detenido el 17 de noviembre de 1877. Su abogado consigue obtener una segunda opinión sobre la autopsia. Fue realizada por el químico Jules Bouis quien desmonta las tesis sobre la presencia intencional de arsénico expuesta por los médicos y concluye que las cantidades de arsénico presentes en el hígado, el estómago y los intestinos de la señora Danval son extremadamente bajas, «en una proporción mucho menor que la contenida en un vaso de agua mineral». Igualmente, indica que la mayoría de los medicamentos y productos farmacéuticos de la época son elaborados con compuestos que contienen arsénico y, por lo tanto, sería normal encontrarlo presente en el cuerpo humano. Apunta que las propias cortinas de la vivienda de los señores Danval está realizadas con una tela que contiene arsénico, aunque considera que tampoco se trata de una intoxicación crónica y, además, los síntomas de la enfermedad de Mathilde corresponde a muchas otras dolencias.
el juicio de Louis Danval
El juicio, iniciado en la Cour d’assises del Sena, el tribunal del jurado, no comenzó hasta mayo de 1878.
En la primera audiencia, durante el interrogatorio, Danval niega categóricamente el envenenamiento de su mujer, rechaza que ella quisiera separarse, que la maltratara y arremete contra la familia de su mujer. El 7 de mayo de 1878 continúa la audiencia con los testimonios de la familia de la víctima, vecinos, amigos y clientes que van realizando declaraciones donde ponen en duda una buena relación entre la pareja, el mal humor del Sr. Danval, suposiciones, opiniones y demás observaciones. La familia de la Mathilde nunca vio con buenos ojos el matrimonio con Danval. El acusado aparece como «el verdugo de la dulce joven cuyo destino le había confiado la familia Jarry: era severo y codicioso.»
La siguiente audiencia de 8 de mayo será el turno de los científicos. Bouis, el perito de la defensa, ratifica su informe: la cantidad de arsénico encontrado en la víctima es insignificante, puede deberse a circunstancias ambientales. El tribunal ante la discrepancia de opiniones, designa al farmacólogo Adolphe Marie Gubler para resolver sobre el asunto de la cantidad de veneno encontrada en la víctima, quien concluye apoyando la opinión de sus colegas Bergeron y Delens, la esposa de Danval muere consecuencia del arsénico.
Esta opinión apuntala el juicio. El 12 de mayo, tras las conclusiones de fiscal y defensa, el jurado por mayoría, en menos de una hora, encuentra culpable de asesinato por envenenamiento al señor Danval, con circunstancias atenuantes que lo libran de la condena a muerte en la guillotina. Es condenado a trabajos forzados de por vida.
Danval, ante el veredicto, reacciona gritando: ¡Soy inocente! ¡Soy una víctima!
Al día siguiente se anuncia recurso de apelación, pero no se llega a interponer. Finalmente, su destino será la colonia penal francesa en el Pacífico, en Nueva Caledonia. Trabajará en la farmacia de la prisión, luego obtendrá permiso para cultivar una concesión. Allí se casa y forma una familia, pero nunca deja de reclamar su inocencia.
En Francia, la ley del 30 de mayo de 1854 sobre la ejecución de la pena de trabajos forzosos establecía que la forma de ejecución de esta condena debía realizarse en una colonia penal y, en caso de buena conducta, a los presos se les podía conceder un terreno. En 1863 se fundó la colonia penal de Nueva Caledonia que llegó a tener unos 7600 convictos. La mayoría de los condenados cumplían su condena en Ile Nou.
Nueva Caledonia, nuevos estudios científicos y Jacques Dhur
El caso Dreyfus, remueve las conciencias de toda Francia. Alfred Dreyfus fue indultado en 1899, pero no será rehabilitado hasta 1906. La prensa no lo olvida, y busca historias sobre injusticias, sobre las condiciones de las cárceles, ¿es posible que existan más inocentes prisioneros por un sistema que ha fallado? El periodista Jacques Dhur buscará y Danval, por fin, tiene a quien contar su historia tras más de 20 años en aquella isla en el fin del mundo. Danval le entrega sus memorias, apuntes y notas sobre el caso. Jacques regresa a Francia convencido de que Louis Danval es inocente.
«Mi deber es hablar, no quiero ser cómplice. Mis noches se verían asediadas por el espectro del inocente que, padeciendo el más horrible suplicio, expira un crimen que no ha cometido»
Émile Zola. Yo acuso. 1898
Jacques Dhur, comienza una campaña para obtener el indulto del farmacéutico a través del periódico le Journal, sabe que la ciencia ha avanzado. A partir de 1900, gracias a la mejora de las técnicas de análisis, varios estudios científicos actualizan los conocimientos sobre toxicología. Estudios como los del químico Gabriel Bertrand (1867-1962) son publicados corroborando la presencia de arsénico de forma natural en el cuerpo humano y otros seres vivos. En un crucero en 1902, el príncipe Alberto I de Mónaco, entusiasta explorador, permite al científico analizar especies capturadas lejos de la costa y a grandes profundidades. Bertrand llega a la conclusión de que el metaloide arsénico aparece de forma constante en los seres vivos. Otros científicos lo avalan ampliando estudios, resulta evidente la presencia de arsénico en determinadas partes del cuerpo de forma natural.
Las conclusiones del juicio contra Danval se basaron en un error al dar por buena la intoxicación de su mujer por arsénico al estar presente aunque fuese una cantidad pequeña.
El 18 de abril de 1902, el presidente de la República Émile Loubet, tras escuchar la opinión de prestigiosos científicos, firma el indulto de Louis Danval.
El regreso de Louis Danval a Francia. La revisión del caso.
Louis Danval, recibe la noticia con sorpresa, pero sin dudarlo deja Nueva Caledonia con su familia. El 12 de agosto de 1902 desembarca en Marsella. Desde allí, en tren llegará a París donde será recibido por la multitud. Asociaciones médicas y farmacéuticas le agasajan con homenajes y comidas. La vuelta de Danval no solo es noticia en Francia, en toda Europa se hacen eco de su caso. Concede entrevistas y publica sus memorias.
Tras el revuelo de los primeros años, Danval, no conforme, lucha por obtener su rehabilitación judicial, no quiere solo un indulto. Luchará por la revisión del caso.
En 1904 se presenta la solicitud de revisión de su juicio argumentando los avances científicos relativos al arsénico. La Cour de Cassation, el más alto tribunal de Francia, a instancias del Ministro de Justicia, ordena una investigación para la revisión del juicio de Danval. Si bien, tal revisión es rechaza en 1906. Danval insiste y se vuelve a rechazar la revisión en 1910. La justicia es tozuda.
Llega la Primera Guerra Mundial, el mundo se detiene, la muerte no, Danval pierde a dos hijos durante el conflicto, pero Louis no cede. Después de 45 años, casi medio siglo después, Louis Danval reclama de nuevo la revisión de su caso aportando nuevas investigaciones científicas como las de Kohn Abrest sobre el arsénico que insisten en la existencia de un arsénico normal en el cuerpo humano, debiendo despreciarse las cantidades pequeñas del veneno entre 1 mg – 3 mg. En la joven esposa de Danval solo encontraron 1 mg. El informe de su perito Bouis en 1878 estaba en lo cierto, adelantándose a la ciencia de la época.
En 1923 se vuelve a estudiar la petición de revisión y el 31 de diciembre, el alto tribunal proclamó la inocencia del farmacéutico Danval al reconocer que el veredicto no estaba fundamentado, fijando una indemnización de 20.000 francos y una renta vitalicia anual de 12.000 francos por error judicial. Danval tenía 79 años.
Ese mismo año, el anciano Danval cae por las escaleras de su casa golpeándose gravemente la cabeza, sufriendo, a partir de entonces, ataques agresivos que obligan a su mujer e hija a solicitar ayuda. Danval fue internado en un asilo hospital donde murió en enero de 1925.
La dosis letal en humanos para el trióxido de arsénico ingerido es de 70 a 180 mg, o aproximadamente 600 microgramos por kg/día (Agency for Toxic Substances and Disease Registry U.S.A ATSDR 2007). Los valores normales de arsénico son: Hasta 3 μg por decilitro en sangre. Hasta 200 μg por litro de orina, o 10 μg por gramo de creatinina en orina, o hasta 50 μg en caso de pacientes expuestos habitualmente. Hasta 5 mg por kilo en cabello o 1 ppm en las faneras (pelo, uñas, etc.) (wikipedia)
Más información y fuentes:
Revisión de la historia de la Farmacia L’Affaire Danval R 294 Pharmaciens et fait-divers. Cecile Raynal.
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Viajes Jurídicos 