Fernando de Loazes

Fernando de Loazes nace en Orihuela (Alicante) en 1497, hijo del médico Rodrigo de Loazes y Togores y de Isabel Pérez, terminada su formación primaria en dicha ciudad, se desplazó a Valencia para comenzar sus estudios universitarios de artes, derecho y teología, continuando los mismos en Italia, en las Universidades de Pavía y Bolonia, donde alcanza en 1519 el doctorado in utriusque, esto es, en Derecho Canónico y en Derecho Civil representado por el antiguo, revisado y renovado derecho del imperio romano germánico de Justiniano, que tuvo su máximo exponente en Bolonia con el Corpus Iuris Civilis, dando lugar al Derecho común.

Leal al rey Carlos I durante las revueltas de las germanías en la ciudad de Orihuela (1519-1523), revueltas sofocadas por el marqués de los Vélez quien fue protector de la familia Loazes, Fernando de Loazes fue nombrado abogado y asesor del concejo oriolano (1522) con Dº Pedro Maza de Linaza gobernador del Reino de Valencia. Es en esta época cuando contrae matrimonio y hay constancia de tres hijos.

En 1525 asciende a fiscal del Tribunal de la Inquisición del Reino de Valencia, y hacía 1530 fue nombrado juez inquisidor del Principado de Cataluña y Rosellón- Cerdaña.

Encargo del rey Carlos I, ya Emperador del Sacro Imperio Germánico, a Fernando de Loazes será el dictamen jurídico sobre la validez del matrimonio entre Enrique VIII de Inglaterra y Catalina de Aragón (hija menor de los Reyes Católicos, tía del Rey Carlos I, ex cuñada de Enrique VIII por viudez de su hermano Arturo y 5 años mayor que él). Enrique VIII solicitó al papa Clemente VII la anulación del matrimonio por causa de parentesco, motivado por el enamoramiento de Ana Bolena y por la falta de descendencia masculina (aunque finalmente su hija María Tudor, fruto de su matrimonio con Catalina, será reina de Inglaterra).

El papa negó la anulación al no encontrar causa justa, decidiendo Enrique VIII romper su matrimonio con Catalina de Aragón mediante juicio y, así en 1533, el Arzobispo de Canterbury declaró nulo el matrimonio siendo apartada por Enrique al castillo de Kimbolton y casándose aquél con Ana Bolena, a quien más tarde decapitó, y, luego, con cuatro mujeres más: Jane Seymour, Ana de Cleves, Catalina Howard y Catalina Parr. Tales decisiones le supusieron para Enrique VIII  romper  con la Iglesia de Roma dando origen a la Reforma anglicana.

Representación del juicio de nulidad de Catalina de Aragón

Dicho dictamen elaborado por Loazes llamado Solennis atque elegans Tractatus in causa matrimo nii Serenissimorum dominorum Henrici et Catherine Anglie Regum (Barcelona, 1531) fue uno de los informes utilizados por el papa Clemente VII para denegar la nulidad y ratificar el matrimonio entre Enrique VIII con Catalina de Aragón. Descarga el dictamen en latín

dictamen jurídico sobre la validez matrimonial Enrique VIII y Catalina de Aragón
Fernando de Loazes. Solenis atque elegans tractatus in causa matrimonii Henrice et Catherine Angliae

Fernando de Loazes durante su etapa como juez inquisidor en Barcelona y siendo virrey de Cataluña San Francisco de Borja, fue asesor de éste en el Gobierno del principado. Será el jesuita, por la amistad trabada con Loazes, quien propició su ordenación sacerdotal y el nombramiento de Loazes como Obispo de la Diócesis de Elna. Posteriormente, fue nombrado Obispo de Lérida (1545) y es en este momento cuando Loazes procede a realizar las escrituras de donación de sus bienes para creación del Colegio universitario Santo Domingo de Orihuela, otorgadas ante el notario de la ciudad de Lérida Francisco Calaf el 13 de septiembre de 1547 y el 13 de abril de 1549.

Acudió a sesiones del Concilio de Trento enviado por el Emperador Carlos V y en 1553, a propuesta del mismo, fue nombrado Obispo de Tortosa donde conocería al arquitecto colaborador del Colegio de San Jaime y San Matías de Tortosa o Colegios Reales, Juan Anglés, quien asumiría el inicio de la construcción del Colegio universidad de Santo Domingo de Orihuela, el Escorial del Levante, el gran proyecto de Loazes. Será en 1569 cuando el Papa Pío V concedió al Colegio la categoría de Universidad Pública igualándola a las Universidades de Alcalá de Henares o Valencia. En el año 1646 el rey Felipe IV la declaró Universidad Real, General y Pública impartiendo en sus aulas Derecho Civil y Canónico, Filosofía y Teología, Medicina y demás artes liberales. Hasta que, tras el periodo de las desamortizaciones, la Universidad de Orihuela fue extinguida en 1835. Años más tarde, en 1872, fue retomada la actividad educativa del edificio como colegio hasta la actualidad.

Grabado Colegio Santo Domingo de Orihuela
Grabado Colegio Santo Domingo Orihuela

En 1560 el papa Pío IV nombró a Dº Fernando de Loazes arzobispo de Tarragona, con Felipe II ya como Rey, y tras su labor como consejero del futuro papa San Pío V, en 1566, éste mismo lo designó patriarca de Antioquía y el 28 de abril 1567 el mismo San Pío V lo nombra arzobispo de Valencia.

En 1563 presidió el brazo eclesiástico en las Cortes de Monzón donde defendió la separación de la diócesis de Orihuela de la de Cartagena con sede en Murcia, en pleito durante años.

El 29 de febrero de 1568, a los setenta años de edad, fallecía en el palacio arzobispal de Valencia instituyendo en testamento como heredero universal de todos sus bienes al Colegio Santo Domingo de su ciudad natal y ordenando ser llevado a Orihuela para ser enterrado en la Iglesia de su Colegio en un sepulcro de mármol con su figura, desgraciadamente, destruido durante la Guerra Civil 1936-39. En su epitafio decía:

Hic JACET ILL(USTRIS) ET R(EVE)R(ENDUS) D(OMINUS) D(ON) FERDINANDVS LOAZES, HVJVS COLLEGII FVNDATOR Epis(COPUS) ELNEN(sis) ILERDEN(sis) ET DERTOSEN(sis) ARCHIEP(iscopus) TARRAC(ONENSIS)ET VALENTIN(us) PATRIARCH(A) ANTIO(CHENUS).
VIR IN VTROQVE JVRE MAXIME VERSATUS, ET NON FVIT PERSONARVM ACCEPTOR, VT EJVS SCRIPTA TESTANTVR. OBIIT DIE 28 FEBRVARII 1568. ÆTATE 70. EJUS TRANSLATIO FACTA EST ANNO 1726.

Aquí yace el Ilustre y Reverendo Señor Don Fernando de Loazes, fundador de este colegio, obispo de Elna, Lérida y Tortosa, arzobispo de Tarragona y Valencia, patriarca de Antioquía.
Varón enormemente versado en ambos derechos, no hizo acepción de personas, como testimonian sus escritos. Murió el día 28 de febrero de 1568, a la edad de 70[años].Su traslación se hizo el año 1726.

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Cenotafio destruido de D Fernando de Loazes

Cuenta una leyenda que Fernando de Loazes enfermó de lepra y al temer el contagio fue repudiado por su familia y amigos, si bien, los dominicos oriolanos lo recibieron y cuidaron en su pequeño convento, al parecer con las aguas medicinales que brotaban en su huerto, logrando que Dº Fernando se recuperara de la enfermedad y en agradecimiento prometiese construir en gran edificio que albergaría el colegio y universidad de Santo Domingo de Orihuela.

Simplemente, es una leyenda, en la que sin duda se inspiró Gabriel Miró al escribir su novela el Obispo Leproso. Miró fue estudiante interno en el Colegio Santo Domingo de 1886-1891.

Fragmento el Obispo Leproso
Fragmento el Obispo Leproso Gabriel Miró

Entre otras obras de Fernando de Loazes citar:

  • Perutilis singularis questio seu Tractatus super nona pagano rum regni Valentie conuersione (Valencia, Juan Jofre, 1525), Obra sobre la conversión de los moriscos donde Loazes distingue coacción absoluta o condicional referido al bautismo aplicado a la fuerza a los moriscos durante la revueltas de las germanías. Descarga el libro completo
  • Consilium siue iuris allegationes reuerendissimi in Christo patris D. Fernandi Loazij … Ilerdensis episcopi … super controuersia oppidi à Mula, orta inter illustrissimum Dñm. à Velez marchionem, et illius súbditos. Defensa sobre los derechos del marques de los Vélez Descarga libro completo

Como curiosidad, por reciente interpretación histórico-política, Loazes está considerado como el 66 presidente de la Generalitat Catalana, apareciendo nombrado como Ferran de Lloances i Peres.

Para saber más sobre la figura de Dº Fernando de Loazes:

10 preguntas sobre Fernando de Loazes

Una labra heráldica del Arzobispo don Fernando de Loazes por Tomás Echarteo y Alberto Montaner

La polémica sobre el bautismo de los moriscos a principios del Siglo XVI. José Goñi